sábado, 20 de febrero de 2010

Generaciones y talento

El ciclo de conferencias Generación de Talento organizado por IESE ha finalizado esta semana con la conferencia “Generaciones y Talento”.

Decidí regalarme un hueco en una agenda que durante las últimas semanas ha sido de vértigo, más que nada por desconectar un rato aunque también por curiosidad por ver que enfoque se daría al tema.

Sorpresa, cuando al presentar la agenda descubro que se va ha hablar sobretodo de la generación X. Vaya, me digo a mi misma, juraría que la agenda hablaba de Y en lugar de X. Miro el papel y así es. Bueno, sigo escuchando. Uff, con la cantidad de cosas que tengo que hacer. Si lo sé no vengo, dos horas perdidas. Baby Boomer? Generación X?, esa es la mía, no? Pero que ha pasado con la generación Y, y el famoso Tsunami de nativos digitales que se nos avecina?. No son estos últimos los que debemos aprender a gestionar, porque vienen a tope con el tema de las tecnologías y como no nos espabilemos nos meriendan en dos días? Yo venía buscando alguna fórmula innovadora para contarle mañana a mi jefe. Bueno, ya que estamos aquí…

Mireia de las Heras nos hace una radiografía de cada una de las generaciones, cuales son las realidades familiares de los diferentes grupos de edad, cuales son sus grupos de referencia, como entienden el éxito, qué les motiva, cómo debemos fidelizarlos, que errores evitar como jefes…

Al detenerse en la generación X el tema empieza a despertar mi interés. Mi cabeza hace Clic! y la jornada empieza a cobrar sentido.

Jaime Lladó, que abordó la segunda parte de la sesión “La gestión del talento en las generaciones Boomer e X” empieza diciendo una gran verdad: “la mayoría de libros de Management han sido escritos por baby boomer con el objetivo de explicar a otros baby boomers como tratar a la generación X”. Seguramente todas las barreras que encontramos en las organizaciones los fanáticos de la gestión del talento no son tan solo generacionales pero sin duda es un tema sobre el que reflexionar.

Finalmente de lo que estamos hablando es de diversidad, en una de sus muchas caras.Las diferencias generacionales, igual que las diferencias culturales o de género nos enriquecen si las abordamos de una manera constructiva y buscando todo aquello que el otro tiene y que me complementa. Los estereotipos ayudan a comprender las diferencias pero, ojo, no nos quedemos en ellos como justificación de todo aquello que no funciona en nuestras organizaciones. Este proyecto no arrancará jamás, mi jefe es un baby boomer… seguro? Y si intentas defender el proyecto pensando en sus motivos en lugar de en los tuyos?

Personas diferentes que buscan un lenguaje común enriquecen a nuestras organizaciones y qué mejor forma de entender a los demás que, ¿Reflexionando sobre los propios valores y motivaciones? ¿Conociendo por qué entendemos el mundo y las organizaciones de forma diferente? Interesándonos por los puntos de vista del otro y ayudándole a crecer comprendiendo que sus motivos son muy posiblemente diferentes a los míos.

Hoy son las organizaciones lideradas por baby boomers que viven para trabajar y que no comprenden la necesidad de conciliación de los X que trabajan para vivir. Pero mañana seremos los líderes X que no comprenderemos la motivación por la gratificación inmediata y la necesidad de vivir y trabajar después, de los jóvenes Y.

Para cerrar la reflexión tres spots que Jaime compartió con nosotros durante la sesión. baby boomers, X, Y aportamos valor a las organizaciones bien desde la experiencia y el sacrificio, bien desde la preparación o bien desde la rapidez de adaptación a los cambios de nuestro entorno. Tres generaciones que conviven en organizaciones cada vez más cambiantes por el impacto de la globalización y de la nueva sociedad red.

10 comentarios:

MarcG dijo...

Elena,

Efectivamente la diversidad, y saber aprovechar lo bueno de la diversidad, es una virtud.

Todos - seamos de la generación que seamos - tenemos nuestras virtudes, juntémoslas para conseguir un resultado óptimo!

Dicho de otra forma, quién no lo haga estará condenado al fracaso.

Saludos.

PD: Contento de volverte a ver por la blogosfera ;-)

Maria Elena dijo...

Marc,

La diversidad es tan infinita como tanto lo son los motivos que tenemos las personas. Hay que construir y facilitar la complementariedad, evitando estereotipos.

Feliz de que haya alguien que pese a mis ausencias me siga leyendo

Tron dijo...

Elena: Totalmente de acuerdo. Hemos de ser capaces de encontrar qué hace especial a cada uno de los miembros de nuestro equipo inmediato y remoto. Todos tienen alguna habilidad especial (o un lote de ellas) que les hace insoportables o que convierte tu equipo en una bomba atómica de creatividad, dependiendo de cómo interpretes, reflejes o asimiles sus oleadas y las conviertas en un partido de tenis agotador y frustrante o en energía constructiva.

Maria Elena dijo...

Tron, muchas gracias por tu comentario. Mira que hay bibliografía y teorías sobre el liderazgo pero al final la única receta que funciona para dirigir la energía de un equipo en la dirección adecuada es fijarse en los motivos individuales cada uno de nosotros decidimos según nuestra realidad particular cuando, como y en qué queremos invertir nuestra energía.

Anónimo dijo...

De lo más sincero y sensato que he leído últimamente sobre la gestión del talento. Como espécimen de la Generación Y, corroboro que lograr liderarnos durante los próximos 10 años será un reto que, desgraciadamente, sobrepasará y abrumará a algunos de los directivos GenX menos preparados. Y no nos engañemos, es una cuestión de actitud y no de conocimientos tecnológicos

Maria Elena dijo...

Francesc,
totalmente de acuerdo en lo de la actitud (no hay edades que marquen las barreras entre generaciones sino actitudes y valores) pero perder el miedo a la tecnología y descubrir que facilita el día a día es importante. Especialmente en la nueva sociedad red donde las nuevas tecnologías están además impulsando y ayudando a que los nuevos valores que incorporaís al mundo de las organizaciones los Y se vayan asentando a velocidad vertiginosa.
Muchisimas gracias por participar en esta discusión

Maria Elena dijo...

Francesc,
totalmente de acuerdo en lo de la actitud (no hay edades que marquen las barreras entre generaciones sino actitudes y valores) pero perder el miedo a la tecnología y descubrir que facilita el día a día es importante. Especialmente en la nueva sociedad red donde las nuevas tecnologías están además impulsando y ayudando a que los nuevos valores que incorporaís al mundo de las organizaciones los Y se vayan asentando a velocidad vertiginosa.
Muchisimas gracias por participar en esta discusión

Unknown dijo...

Me alegro de ver que vuelves a compartir reflexiones y momentos. Ya sabes que me hubiera gustado mucho asistir a la sesión del IESE. Pero, después de leer tu post, prefiero haber "asistido" a tu crónica. Me parece que hace más completas las conclusiones. Y sobre todo esto del liderazgo y la convivencia generacional en las organizaciones... cada vez veo más clara la necesidad de movernos hacia modelos de liderazgo compartido, evitando los modelos de liderazgo centralizado. Porqué mientras el liderazgo sea exclusivamente centralizado, la diversidad creada por la convivencia generacional es distancia en lugar de ser energía. Hasta pronto.

Maria Elena dijo...

Virgili,

Gracias por participar en la discusión. Nos vemos pronto

Unknown dijo...

Gracias Elena,
Spots muy visuales, para hacernos reflexionar sobre cuánto hemos avanzado, aunque aún nos quede un largo camino por recorrer....
Hablar de diversidad, implica hablar de tolerancia, sobretodo de tolerancia a la diferencia, cualquiera que ésta sea. En mi opinión, esta es una de las cualidades más valiosas de un buen líder, del liderazgo inclusivo.
Buen fin de semana!
Montse Ventosa