lunes, 15 de febrero de 2016

DIVERSIDAD Y CREACION DE VALOR


Promover la diversidad es hoy en día muy relevante para cualquier empresa que se considere sustentable. Por lo tanto, no podemos autodenominarnos sustentables si no nos tomamos este asunto en serio. Diversidad es eficiencia e innovación, por ende debemos considerarla como una fuente de riqueza en términos de nuestras personas y nuestros resultados económicos.

Bien sabemos que la diversidad no se da de forma natural, especialmente durante períodos de incertidumbre y contracción económica, que nos impulsan a buscar la seguridad y transitar por caminos conocidos.

Avanzar en diversidad requiere un fuerte compromiso, revisar muchas de nuestras habituales prácticas de recursos humanos, romper clichés y superar estereotipos. En resumen, salir de nuestra área de comodidad. Pero nada de eso es posible si no nos fijamos objetivos y diseñamos una hoja de ruta que nos enseñe el camino que debemos seguir.

La diversidad es un componente natural de muchas organizaciones, también del Grupo CAP. En nuestro caso, vivimos desde hace más de 65 años inmersos en nuestras comunidades, existimos y operamos en diferentes regiones de Chile y nuestra actividad implica una relación muy directa con las localidades vecinas.

En ese contexto, el Grupo CAP ha sido y debe seguir siendo un reflejo de la sociedad y las personas. Una sociedad que es también cada vez más diversa y con grandes desafíos en materia de inclusión laboral y social.

Tomar la iniciativa, comprometernos y actuar con coherencia son requisitos indispensables para promover la igualdad de oportunidades y asegurar que nos hacemos cargo de las diferencias de cada una de nuestras personas, permitiendo que todas tengan la oportunidad de contribuir al éxito de nuestra organización así como a la consecución de nuestra misión y aporte a la sociedad.

Estamos  convencidos de que para ser eficientes y exitosos, nuestras organizaciones requieren de talentos diversos, y es por ello que durante 2015 formalizamos nuestra política de diversidad como una manera de comprometernos formalmente con la creación de procesos de igualdad de oportunidades para diferentes grupos.

En definitiva, con diversidad todos ganamos porque aseguramos la integración de miradas diferentes que sin duda nos llevarán a mejorar de forma continua nuestra eficiencia y productividad, manteniéndonos conectados e integrados con nuestras personas, comunidad y grupos de interés.  Y porque La diversidad es una fuente incuestionable de innovación y por consiguiente de creación de valor.



María Elena Sanz es Socia Fundadora de + Mujeres

Actuar, y no solo hablar


El porcentaje de mujeres en el Sistema de Empresas Públicas (SEP) ha llegado al 29,3%, siendo el objetivo del gobierno alcanzar el 40%. Una excelente noticia ya que, según Ferrary (2010) y Richard (2000), un subgrupo empieza a tener influencia cuando compone el 35% del grupo total. Pese a todo, la presencia de mujeres en directorios  (5,4% de empresas IPSA), o en equipos gerenciales de primera línea (10%),  deja mucho que desear.

Las cifras ya las conocemos. Del mismo modo, son recurrentes las notas, columnas y estadísticas en los principales medios de prensa. No obstante, ¿Cuánto tiempo más vamos a seguir hablando del tema? ¿Realmente necesitamos más argumentos o estudios que avalen el aporte de la diversidad a nuestros directorios, equipos ejecutivos y empresas? Si  ambicionamos mejor reputación para nuestras organizaciones y más innovación para seguir aportando al desarrollo económico y social,  ¿No sería un gran logro país mejorar nuestro PIB en un 3% incrementando un 1,25% la participación de las mujeres?

La tarea no es tan difícil;  eso sí, tenemos dos caminos: el primero es seguir hablando de las barreras sociales y culturales convirtiéndonos en víctimas de estas o el segundo, tomar la iniciativa y empezar a generar cambios.

Es importante hacer extensivo un llamado a todos nuestros líderes gremiales y empresariales, presidentes, gerentes generales y sobre todo a los gerentes de recursos humanos para que inviten a sus equipos a realizar las siguientes reflexiones: ¿Qué significa la incorporación de las mujeres para su organización, su consejo, sus clientes y para usted a nivel individual? y ¿Cuáles son las acciones que han realizado como directorio/equipo ejecutivo,  o personalmente, en los últimos 12 meses para incorporar a más mujeres en su organización?

Un buen punto de partida es fijarse metas concretas  y revisar, con la mirada de la diversidad de género, nuestras prácticas de gestión de personas.

Seamos agentes de cambio porque se hace urgente actuar, y no solo hablar.

Columna publicada el Lunes 15 de febrero de 2016 en el Pulso  


Más sobre esta iniciativa de transformación en www.masmujeres.cl